Fecha de nacimiento: 31 de enero de 1976
Edad a la fecha del secuestro: 15 días / 20 días
Zona de Secuestro: 1/11/112
Fecha de secuestro: Después del 13 de febrero de 1976
Fecha de localización: agosto de 2000
Fecha de restitución: 22 de Agosto de 2001
La niña fue secuestrada por fuerzas de seguridad junto a sus padres, Hilda Torres y Roque O. Montenegro, luego del 13 de febrero de 1976 en Lanús, provincia de Buenos Aires.
Hilda Victoria Montenegro fue localizada en agosto de 2000, pero recién se reencontró con su familia materna y paterna en junio de 2001.
Había sido apropiada por el Coronel Hernán Antonio Tetzlaff y su esposa María del Carmen Eduartes, quienes la anotaron como María Sol Tetzlaff Eduartes, nacida el 28 de mayo de 1976. Hernán Tetzlaff fue represor, actúo en grupos de tareas bajo el apodo del "Gordo José". Fue jefe de sección o grupo El Vesubio, Batallón de Artillería -Logístico 10 Villa Martelli.
Tetzlaff no estuvo solo en la apropiación de la menor; además de la obvia complicidad de su esposa, María Eduartes, tuvo la ayuda del médico Juan Carlos Zucca, que firmó la partida de nacimiento falsa, según la cual María del Carmen Eduartes –esposa del represor– dio a luz el 28 de mayo de 1976. Pero los análisis de sangre realizados en el Banco Nacional de Datos Genéticos demostraron que ese parto nunca existió y que la supuesta hija de Tetzlaff era en realidad Hilda Victoria Montenegro, que nació el 31 de enero de 1976 y fue inscripta por sus padres el 10 de febrero de ese año, poco antes de que toda la familia fuera secuestrada.
Un testimonio importante para este caso fue proporcionado por el padre de una desaparecida que durante ocho meses buscó a su nieta. Debido a que había trabajado en la Marina hasta 1967, este señor pudo entrevistarse con Santiago Omar Riveros, comandante de Institutos Militares, para pedirle datos sobre su hija y su nieta, que habían sido secuestradas a principio de junio de 1976. El militar designó a Tetzlaff, que en ese momento se desempeñaba como “representante de la Escuela de Comunicaciones y era jefe de la zona de San Isidro, Boulogne y Tigre” y “trabajaba en forma conjunta con el Batallón de Inteligencia de Campo de Mayo”, para que “lo ayudara a reconstruir el operativo” en el que se habían llevado a la mujer y la beba.
El testigo declaró ante el juez federal Eduardo Marquevich que Tetzlaff y su esposa le confesaron que no podían tener hijos. En una oportunidad, el represor lo llevó a una vivienda donde la noche anterior había participado de un procedimiento del Ejército en el que –según dijo– “los guerrilleros padres” habían muerto. El entonces mayor –que se retiró como coronel– le aseguró: “cuando entramos nos encontramos con dos chicos con los ojos gigantes, abiertos y me quedé con uno”. Ante ese comentario, el abuelo fue a ver a Riveros para preguntarle si su nieta no había sido entregada a una pareja como la de Tetzlaff-Eduartes. El general le aseguró que en su caso no había ocurrido lo mismo pero que “esas eran normas para que los hijos de zurdos caigan en hogares bien constituidos”. Incluso hizo una mención acerca de que existía una estructura dentro de las Fuerzas Armadas para apropiarse “de los hijos menores de matrimonios zurdos con el fin de enderezarlos”.
Este caso fue uno de los cinco que sirvieron como base para la detención del dictador Jorge Rafael Videla, ordenada por Marquevich el 9 de junio de 1998. Las apropiaciones de Mariana Zaffaroni Islas, Carlos D`Elia y los dos jóvenes robados por el mayor médico del Ejército Norberto Bianco y su esposa fueron los otros cuatro expedientes que se sumaron para que el magistrado considerara que Videla era autor mediato del robo de hijos de desaparecidos durante la última dictadura militar.
Actualmente Hilda está casada y es mamá de tres niños.
http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/investig/menores/r2300.htmEdad a la fecha del secuestro: 15 días / 20 días
Zona de Secuestro: 1/11/112
Fecha de secuestro: Después del 13 de febrero de 1976
Fecha de localización: agosto de 2000
Fecha de restitución: 22 de Agosto de 2001
La niña fue secuestrada por fuerzas de seguridad junto a sus padres, Hilda Torres y Roque O. Montenegro, luego del 13 de febrero de 1976 en Lanús, provincia de Buenos Aires.
Hilda Victoria Montenegro fue localizada en agosto de 2000, pero recién se reencontró con su familia materna y paterna en junio de 2001.
Había sido apropiada por el Coronel Hernán Antonio Tetzlaff y su esposa María del Carmen Eduartes, quienes la anotaron como María Sol Tetzlaff Eduartes, nacida el 28 de mayo de 1976. Hernán Tetzlaff fue represor, actúo en grupos de tareas bajo el apodo del "Gordo José". Fue jefe de sección o grupo El Vesubio, Batallón de Artillería -Logístico 10 Villa Martelli.
Tetzlaff no estuvo solo en la apropiación de la menor; además de la obvia complicidad de su esposa, María Eduartes, tuvo la ayuda del médico Juan Carlos Zucca, que firmó la partida de nacimiento falsa, según la cual María del Carmen Eduartes –esposa del represor– dio a luz el 28 de mayo de 1976. Pero los análisis de sangre realizados en el Banco Nacional de Datos Genéticos demostraron que ese parto nunca existió y que la supuesta hija de Tetzlaff era en realidad Hilda Victoria Montenegro, que nació el 31 de enero de 1976 y fue inscripta por sus padres el 10 de febrero de ese año, poco antes de que toda la familia fuera secuestrada.
Un testimonio importante para este caso fue proporcionado por el padre de una desaparecida que durante ocho meses buscó a su nieta. Debido a que había trabajado en la Marina hasta 1967, este señor pudo entrevistarse con Santiago Omar Riveros, comandante de Institutos Militares, para pedirle datos sobre su hija y su nieta, que habían sido secuestradas a principio de junio de 1976. El militar designó a Tetzlaff, que en ese momento se desempeñaba como “representante de la Escuela de Comunicaciones y era jefe de la zona de San Isidro, Boulogne y Tigre” y “trabajaba en forma conjunta con el Batallón de Inteligencia de Campo de Mayo”, para que “lo ayudara a reconstruir el operativo” en el que se habían llevado a la mujer y la beba.
El testigo declaró ante el juez federal Eduardo Marquevich que Tetzlaff y su esposa le confesaron que no podían tener hijos. En una oportunidad, el represor lo llevó a una vivienda donde la noche anterior había participado de un procedimiento del Ejército en el que –según dijo– “los guerrilleros padres” habían muerto. El entonces mayor –que se retiró como coronel– le aseguró: “cuando entramos nos encontramos con dos chicos con los ojos gigantes, abiertos y me quedé con uno”. Ante ese comentario, el abuelo fue a ver a Riveros para preguntarle si su nieta no había sido entregada a una pareja como la de Tetzlaff-Eduartes. El general le aseguró que en su caso no había ocurrido lo mismo pero que “esas eran normas para que los hijos de zurdos caigan en hogares bien constituidos”. Incluso hizo una mención acerca de que existía una estructura dentro de las Fuerzas Armadas para apropiarse “de los hijos menores de matrimonios zurdos con el fin de enderezarlos”.
Este caso fue uno de los cinco que sirvieron como base para la detención del dictador Jorge Rafael Videla, ordenada por Marquevich el 9 de junio de 1998. Las apropiaciones de Mariana Zaffaroni Islas, Carlos D`Elia y los dos jóvenes robados por el mayor médico del Ejército Norberto Bianco y su esposa fueron los otros cuatro expedientes que se sumaron para que el magistrado considerara que Videla era autor mediato del robo de hijos de desaparecidos durante la última dictadura militar.
Actualmente Hilda está casada y es mamá de tres niños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario